Haciendo limpieza del one drive me encontré con una carta que habÃa escrito allá por el año 2009 cuando mis hijos eran unos bebes.
Estaba hecha para publicarla en el blog Maternidad Saludable que tenia en ese momento, pero la acabo de encontrar y me pareció lindo compartirla con ustedes.
"Hola mamás, hoy les voy a contar un poco de mi historia cómo fue trabajar con una bebé.
Desde que me recibà en 2004, comencé a trabajar en diferentes lugares, al principio trabajaba en un centro de alta complejidad donde se atendÃan pacientes que estaban con algún problema cardÃaco sean niños o adultos. Fue un trabajo bien remunerado y con muchas oportunidades de crecer profesionalmente, me sentÃa muy feliz de haber conseguido un trabajo asà ni bien recibida ya que entrar a formar parte del un staff de centros especializados con esa categorÃa no es fácil, pero bueno ahà estaba yo cumpliendo con mi labor; ayudar a las personas que requieren cuidados cuando tienen algún problema en su salud.
Amo mi profesión y disfruté trabajar ahÃ.
En ese tiempo sólo éramos mi novio y yo. El estudiaba Medicina y yo trabajaba como les contaba, a veces hacia guardias de 48 horas seguidas y estaba todo bien pues ese era mi trabajo y yo lo disfrutaba, mi novio entendÃa y además aprovechaba el tiempo que estaba solo para estudiar y sacar las pocas materias que le quedaban para recibirse.
Por ese entonces recuerdo que me agarro unas ganas de ser madre, tenÃa 26 años (parece que ese momento le llega a cualquier mujer), y ahà estaba yo , buscando y deseando tener un bebé. Ya hacÃa tiempo que convivÃamos. Yo tenÃa un buen trabajo y el pronto se recibirÃa y tendrÃa trabajo asà que nos pareció que era un buen momento para hacer crecer esa pequeña familia que estábamos armando.
Pero algo sucedió en el medio y fue que mi novio efectivamente se recibió consiguió su tÃtulo tan anhelado y logro un pase para hacer una residencia (especialidad), en un pueblo que quedaba a 300 kilómetros de donde vivÃamos. Se fue y quedé sóla con mi trabajo, nos verÃamos cada vez que podÃamos total la residencia duraba poco tiempo y luego volverÃa, pero sucedió que en esas idas y venidas se cumplió lo que tanto anhelaba: me habÃa quedado embarazada.
¡¡Que emoción!! Recuerdo como si fuera hoy lo primero que hice fue llamarlo y contarle la noticia. Los dos estábamos felices.
Después le conté a mis compañeras de trabajo que seguÃan toda esta novela 😃😃 y sabÃan cuanto deseaba tener un bebé.
Pronto comenzó a crecer la panza y tenÃa que tomar una decisión o seguÃa con mi trabajo bien remunerado o me iba tras el hombre que amaba y como es de imaginarse tomé la segunda. Hicimos la mudanza y me fui a ese pueblo donde él estaba, no fue fácil no conocÃa el lugar, estaba embarazada, la mayor parte del tiempo estaba sola porque el trabajaba muchas horas por dÃa. Pero ahà estábamos juntos.
Mi panza creció y creció hasta que llegó el momento de dar a luz y vino mi primer hija, Virginia Carolina a la que adoro con todo mi corazón. Nos trajo alegrÃa a nuestras vidas. Pasé varios meses sin trabajar, hasta que mi bebé cumplió nueve meses y tuve que comenzar a buscar trabajo, lo necesitábamos. Conseguir trabajo no fue tan difÃcil enseguida me llamaron de varios lugares y terminé eligiendo el hospital que es público, porque tenÃa mas beneficios.
Pero ahora se me suscitaba un problema con quien dejarÃa a mi bebé de meses?
Como les contaba estábamos en un lugar alejado de mis padres (100 Km) y a (300 Km) de mis suegros asà que no tenÃa ayuda de nadie estábamos los tres solos. Cuesta cuando no tienes a nadie de confianza, pero bueno tenÃa que trabajar, después de unos dÃas de búsqueda conseguà una chica muy buena la tuve unos dÃas a prueba mientras yo estaba para poder verla trabajar y ver como se llevaba con mi nena, como vi que habÃa conexión entre ellas me fui a trabajar tranquila.
Como mis horarios de trabajo son bastante complicados a veces hay que hacer guardias a la mañana de 5 a 13 hs, otras de 13 a 21 hs y otras veces de 21 a 5 de la mañana. Esto me dificultaba un poco porque a las chicas les cuesta adaptarse a esos horarios.
Mi salvación fue un jardÃn maternal que tenÃa el hospital para todas las mamas que trabajaban ahÃ, asà que me organizaba de tal manera que la niñera quede con mi hija en los horarios en que no estaba abierta la guarderÃa es decir desde las 4:30 de la mañana que salÃa a trabajar hasta las diez quedaba con la niñera y después ella la llevaba hasta la guarderÃa y ahà quedaba hasta que yo pasaba al mediodÃa a buscarla. Muchas veces la encontraba dormida, ya habÃa comido asà que nos Ãbamos a dormir siesta juntas o con el papá.
Cuando me tocaba trabajar de noche, la dejaba con su papá o si él estaba de guardia la dejaba a la niñera y a la bebé solas en casa, yo me aseguraba de dejarles la comida preparada tanto para mi hija (papillas), como para la chica. También tenÃa su celular cargado y a mano por si necesitaba llamarme a mi o a mi marido en caso de urgencia.
Les cuento todo esto porque se que hay muchas mamás que tal vez pasan por lo mismo.
Hace poco leÃa que las mamás que trabajamos nos estresamos más que los hombres porque estamos pendientes de lo que pasa en nuestro hogar mientras estamos trabajando. Esto no deberÃa ser asÃ, si nos organizamos (aunque después de muchooos años de haber escrito esto digo que es fácil decirlo, difÃcil ejecutarlo, pero bueno sigamos jeje).
También a modo de ejemplo quiero contarles algo que me paso para que no les suceda y eviten cometer los mismos errores.
Un buen dÃa me quede sin niñera, la chica buena que tenÃa ya no iba a poder venir más.....y ahà se me presento nuevamente el dilema con quién dejo a mi hija.
Por unos dÃas la lleve a trabajar conmigo hasta que abra la guarderÃa y luego la dejaba ahà (esto lo podÃa hacer porque tenÃa una jefa que era un amor de persona). Pero algo tenÃa que hacer asà que busque desesperadamente una chica y la primera que me ofrecieron la tome. ERROR!!! Nunca hagan eso, asesórense bien con quien van a dejar a sus hijos, resulta que esta chica tenÃa muchos problemas emocionales y económicos y no tenÃa nada de paciencia con criaturas pequeñas, solo necesitaba un trabajo por los problemas económicos que tenÃa y nada más.
Pronto empecé a ver moretones en las piernitas de mi gorda y me empezó a llamar la atención le pregunté que le habÃa pasado y me contestó que la nena se habÃa caÃdo y golpeado hasta que un dÃa mi marido llego a casa y escucho como esta mujer retaba y zamarreaba a Virginia, fue el motivo para despedirla. Pero bueno esto nunca hubiese pasado si yo me asesoraba y buscaba un poco más.
Me sentà culpable y le pedà mil veces perdón a mi pequeña....😔😔
Pero como de todo se aprende, pronto conseguà una chica que me super recomendaron era como que si alguien me la envió del cielo, la recuerdo y la recordaré siempre, se llama Micaela. VivÃa cerca de nuestra casa, conocÃa a su familia y ellos a nosotros, tenÃa buen porte era muy educada, muy amable, cariñosa y fue muy fácil ganarse el cariño de mi hija. Yo me ayudaba de vecinos que me contaban que la veÃan a las dos jugando y divirtiéndose el tiempo que yo estaba ausente.
Mi marido y yo llegamos a apreciar mucho a esta chica. Ahora si podÃa ir a trabajar tranquila sabiendo que estaba en buenas manos. Por suerte el lugar donde vivÃa no era muy grande y las distancias que hay que hacer para ir al trabajo o a la casa son pequeñas; asà que cada vez que podÃa si tenÃa una tarde o una mañana tranquila me hacÃa una escapada hasta la casa y las vigilaba que todo este bien, por suerte siempre que llegaba las encontraba jugando.
Fue un tiempo hermoso, trabajaba tenÃa dinero para gastarlo en lo que yo querÃa (pagar cuentas, gustos, etc) y habÃa logrado la tranquilidad de saber que mi niña estaba bien cuidada cuando yo no estaba.
Para compensar ese tiempo que yo no estaba con ella, los dÃas que me tocaba trabajar a la tarde dormÃamos las dos juntitas abrazadas hasta tarde, mi marido se iba a trabajar temprano y quedábamos las dos solas, yo le daba teta asà que esa era su forma de conectarse conmigo y yo con ella.
Cuando trabajaba de mañana y tenÃa la tarde libre salÃamos al parque o alguna plaza cerca y los fines de semana Ãbamos los tres a la plazoleta, llevábamos juguetes, mate y tenÃamos ese tiempo tan preciado para descansar y conectar.
Trabajar con bebes es posible solo es cuestión de organizarse, siempre buscar con mucha recomendación tanto las niñeras o la guarderÃa donde dejaremos a nuestros hijos. Y asesorarnos que lo que nos dicen que harán lo cumplan. Yo me asesoraba que le dieran leche la leche que yo les dejaba(que era leche que me habÃa extraÃdo), que le cambien los pañales con regularidad, en fin todos los cuidados que tu le brindas y que te gustarÃa que le brinden a tu bebé las personas a las cuales tu les estas pagando para que realicen ese trabajo.
Soy Graciela, una mamá agradecida con la vida porque me permitió disfrutar de varias etapas de la crianza. Ahora estoy en la etapa de adolescencia, pero ese es tema para otro post.
Saludos y me gustarÃa leerlas y escuchar sus comentarios.